Privación de la Tecnología

Con la nube asumiendo los dólares de I + D y los presupuestos de TI, los sistemas tradicionales se están quedando atrás.

por David Linthicum

Hemos oído hablar de la deuda técnica: el acto de aprovechar las soluciones para acelerar la implementación con el entendimiento de que la solución no es óptima pero que tendrá que solucionarse más adelante. Sin embargo, puede haber una nueva categoría de costos técnicos que aún no entendemos, pero que lo veremos muy pronto.

Privación de la Tecnología
Privación de la Tecnología

Estoy hablando de privación técnica del derecho a voto. En pocas palabras, este es el concepto de tecnología tradicional (tecnología heredada) que no tiene el poder de retener dólares de I + D a medida que todo avanza hacia plataformas más modernas (computación en la nube pública).

En 2018, esta era una tendencia tan obvia que generó una publicación de blog sobre la marcha forzada hacia la computación en la nube. Introdujo la idea de que, según los datos de gasto en I + D, la nube pública se había convertido en la plataforma favorecida. La mayor parte de la financiación había comenzado a canalizarse hacia tecnologías nativas de la nube y de terceros que admiten nubes públicas. Esto incluyó seguridad, monitoreo y administración, gobernanza y desarrollo de aplicaciones, realmente las cosas centrales que mantienen los sistemas en funcionamiento y las interrupciones son poco frecuentes.

Se avecinan problemas para una gran cantidad de empresas que utilizan tecnología heredada. Si todo el gasto en tecnología se destina a sistemas basados ​​en la nube, ¿qué queda para las plataformas tradicionales? Aquellos que apoyan sistemas más tradicionales se verán privados de sus derechos en relación con el poder que ejercían hace solo unos años.  

Habrá algunas desventajas importantes para las empresas que continúan utilizando tecnología privada de derechos, que incluyen:

  • Falta de actualizaciones y correcciones para respaldar el mantenimiento continuo de los sistemas. Esto puede ser tan inocuo como perder algunas mejoras de rendimiento, o tan grave como la falta de parches de seguridad que podrían evitar una infracción importante.
  • Poco poder para influir en la hoja de ruta del producto. Si el 80 por ciento de los dólares de I + D se gastan en otra parte, no tendrá mucho que decir sobre cuál debería ser el producto, a corto o largo plazo.
  • ROI reducido. A pesar de que el soporte y las mejoras han disminuido o disminuirán, las tarifas de licencia o suscripción aún permanecen. No es probable que reciba descuentos por menor valor entregado y mayor riesgo. 

¿Qué se puede hacer? No mucho, aparte de comprender cómo está cambiando el mercado y planificar en consecuencia. Los que corren mayor riesgo son las empresas que admiten aplicaciones y conjuntos de datos que están contraindicados para las nubes públicas. Es posible que tengan que permanecer en las instalaciones o dentro de un MSP y deben lidiar con la privación técnica del derecho a voto.

En realidad, esto no es nada nuevo. Todos hemos tenido plataformas que fueron descontinuadas o quizás compradas y luego descuidadas. El cambio obliga a la TI empresarial a buscar nuevas excavaciones, con suerte, aquellas que no perderán participación de mercado e interés en el corto plazo.

Fuente: https://www.infoworld.com/article/3596317/technology-disenfranchisement-is-now-a-thing.html

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