Cada vez que hay una polémica con un cómico se vuelve al eterno debate sobre los límites del humor. Eterno porque lleva toda la vida con nosotros. ¿Cuál es la solución, entonces?

Cada vez que hay una polémica con un cómico se vuelve al eterno debate sobre los límites del humor. Eterno porque lleva toda la vida con nosotros. ¿Cuál es la solución, entonces?