El mayor impedimento para el crecimiento no es el conocimiento disponible, sino la forma en cómo escribimos el mismo e interoperamos a través de él.
Esto genera la exclusión de miles de personas que, con un alto know-how pero sin conocimiento de programación, no se sienten integradas a la Sociedad Digital. No hay plataformas y/o ecosistemas digitales sencillos donde puedan transformar su valor agregado en aplicaciones y/o contenidos reusables consumibles por las mismas, volviéndolas más “inteligentes”, cooperativas e inclusivas.
Existe una creciente preocupación, pues, de idóneos, estudiantes y profesionales no tecnológicos por conocer programación para el desarrollo de sus emprendimientos. Hoy en día necesitan acceder a los recursos necesarios para escribir un proceso multinivel de forma fácil y eficiente, concentrándose en la lógica de su negocio y no en desarrollar software y/o contenidos que ya existen (benchmarking).
Herramientas como GeneXus®, Clarion®, WinDev® o Magic® están aún muy lejos del concepto “sólo especificar”.
El cooperativismo es el centro conceptual y filosófico de toda la plataforma propuesta. Solamente el aporte multidisciplinario de comunidades (abiertas, cerradas, verticales u ubicuas) es capaz de implementar clusters, procesos, tareas, indicadores, reglas y agentes estandarizados para el sector productivo, dando una solución inclusiva, práctica y tangible.
Para lograrlo, hemos simplificado los objetos componentes del ecosistema KWaaS (servidores sinápticos, clusters, neuronas, procesadores, usuarios), al tiempo que los componentes reusables de conocimiento se escriben utilizando exclusivamente estándares internacionales (sintácticos y semánticos, como SNOMED-CT y Datos Abiertos) para lograr la imprescindible interoperabilidad cooperativa, tanto interna como global.
No existen en el mercado plataformas (mucho menos gratuitas) para aplicaciones de escritorio y móviles que generen, como si fuera un puzle, un proceso que resuelva todos los niveles (educativo, conceptual, catálogos con identificadores únicos -UID/OID-, datos abiertos, sensores para Internet de las Cosas y robótica, big data, analítica, calidad, comunicaciones, Leyes/Derecho Digital, contabilidad, logística y tableros de control) en un contexto que tienda a fortalecer las buenas prácticas y la no replicación de costos y esfuerzos.
La prototipación y la aproximación por ensayo y error utilizando tecnologías que “oculten” la complejidad al Usuario Final que desea innovar y/o crear su emprendimiento es un desafío fundamental de la incipiente Sociedad Digital, respecto a dotar a los ciudadanos de un valor agregado acorde a sus talentos.
Entre muchas posibilidades, el primer prototipo generará un kit con los componentes básicos para construir tareas, procesos y clusters colaborativamente, trazabilidad y gestión. A lo largo de la experiencia, hemos comprobado que la información justa en el momento justo aumenta la asertividad de la toma de decisión. Cambia vidas. Si ésta información está continuamente actualizada por una comunidad de usuarios, estamos obteniendo una herramienta de inclusión práctica y social poderosa.
Es vital tender lazos entre las personas que realmente saben lo que hacen y quienes necesitan esta información.