Sin lugar a dudas, la inteligencia artificial (IA) ha transformado varios sectores de nuestra sociedad, desde la atención médica hasta las finanzas, desde la educación hasta el entretenimiento. Sin embargo, a medida que la IA continúa evolucionando e impregnando nuestras vidas, trae consigo una serie de consideraciones éticas con las que la sociedad debe lidiar. Mientras nos encontramos en la intersección de la IA y la ética, es crucial desarrollar un plan para un futuro más justo y equitativo.
