Personas malintencionadas están usando inteligencia artificial para difundir mentiras y alterar las elecciones en los países, pero las mismas herramientas pueden utilizarse para defender la verdad.

Personas malintencionadas están usando inteligencia artificial para difundir mentiras y alterar las elecciones en los países, pero las mismas herramientas pueden utilizarse para defender la verdad.
Noticias falsas, hechos alternativos o –por llamarlo de modo más tradicional– sencillamente mentiras: estos términos se han hecho omnipresentes en cualquier análisis del discurso político.